YO soy mucho de la Montaña. Soy de la Montaña de toda la vida. De la mar de Castilla. De la que crió a media España con el Pelargón que Nestlé hacía en La Penilla. Soy de la Montaña del sobao pasiego.La que inventó la emigración antes que nadie y eso de los emprendedores antes que existiera tal palabra. Hablo de la Montaña de los montañeses de Sevilla y de los chicucos de Cádiz. La de los jándalos que se vinieron a trabajar a Andalucía con pantalón corto, se pasaron la vida detrás del mostrador de un almacén de ultramarinos o de una tienda de comestibles, durmieron debajo de ese mismo mostrador sin quitarse el babi de crudillo, ahorraron y cuando tuvieron un dinero se establecieron como comerciantes, con tiendas que pregonaban poemáticos nombres en recuerdo de su tierra: El Valle del Pas, La Flor de Toranzo, La Gloria de Villacarriedo. Esa es mi Montaña, qué Cantabria ni Cantabria.ANTONIO BURGOS.

domingo, 30 de agosto de 2009

Festividad de los Santos Emeterio y Celedonio, Patronos de la ciudad y Diócesis de Santander





De arriba a abajo, reliquias de los Santos Mártires y procesión con las reliquias a principios del pasado siglo.



Hoy, nuestra ciudad y Diócesis celebra a sus santos Patronos, los santos Emeterio y Celedonio.


Emeterio y Celedonio eran oriundos de Calahorra (La Rioja) y sufrieron en esa ciudad el martirio durante la persecución de Diocleciano, en torno al año 298. Emeterio y Celedonio militaron en las legiones romanas, pero las abandonaron profesando públicamente la milicia de Cristo.
Llevados ante un tribunal, confesaron su fe y fueron atormentados en la cárcel por algún tiempo. En las afueras de la ciudad, junto al río Cidacos, afluente del Ebro, sufrieron el martirio y fueron decapitados un 3 de marzo. Allí quedaron sepultados sus restos.
Las reliquias de los Santos Mártires fueron traídas a Cantabria, como otras tantas, en la Alta Edad Media por razones de seguridad, defendiéndolas de las incursiones árabes y estuvieron ocultas bajo la actual Iglesia de El Cristo. En unas excavaciones realizadas en 1531 se hallaron y se encerraron en los actuales relicarios y se expusieron al culto en el templo donde ahora reposan.
La devoción a los Santos Mártires no solo afecta a la ciudad de Santander, que probablemente toma su nombre de San Emeterio, sino también a la región. El Papa Pío VI, a petición del entonces obispo de Santander, Menéndez de Luarca, en Breve del 30 de septiembre de 1791 los declaró Patronos de la Diócesis.




No hay comentarios:

Related Posts with Thumbnails